El aumento de la esperanza de vida ha abierto nuevos escenarios en el ámbito de la gente mayor. La mejora de la calidad de vida ha pasado a formar parte del primer nivel de la agenda política y social de las administraciones. Además, según datos del Instituto de Estadística de Cataluña, en 2050, uno de cada tres catalanes tendrá más de 65 años.

En este contexto nace el Barcelona Aging Collaboratory (BALL), un laboratorio que tiene que desarrollar soluciones innovadoras para avanzar hacia un envejecimiento saludable. Las entidades impulsoras del proyecto son la Federación de Asociaciones de Gente mayor de Cataluña, Parc Sanitari Pere Virgili, Instituto de Robótica e informática Industrial, Universitat Ramon Llull, Universitat Oberta de Catalunya, Fundación iSocial, Grup Efebé, Qida, Universal Doctor y el Instituto de Investigación Vall de Hebrón.

“Hablamos de un proyecto estratégico, donde entidades de diferentes características han sabido llegar a un acuerdo”, apunta Anna Fornt, directora general de Efebé. Todas las organizaciones implicadas trabajan bajo la modalidad de la cuádruple hélice. Es decir, unión de esfuerzos para poner las personas en el centro de todas las acciones.

El trato de la gente mayor en las ciudades

La problemática de la gente mayor en la ciudad cuenta con obstáculos que se puede encontrar cuando tiene que subir unas escalas o utilizar el transporte público. “La soledad y el sentimiento de pertenencia a un entorno son cosas que muchas veces no se tienen en cuenta”, recoge Anna Fornt.  La sensación de seguridad, “dentro y fuera del hogar”, es un aspecto olvidado tal como se apunta desde Efebé. Como entidad experta al organizar espacios y rutinas por gente mayor, Fornt hace un llamamiento a dejar atrás “la connotación negativa de los viejos”. Además, el robot del Barcelona Aging coLLaboratory es capaz de automatizar tareas logísticas de los hospitales y centros residenciales, mejorando así la calidad del servicio.