En verano de 2015 visitamos de nuevo la Escuela Lleó XIII ante la necesidad de incorporar una zona de servicios, cambiadores y un espacio para dar el biberón a los más pequeños en las aulas infantiles. Para realizar estas acciones, primero tenemos que reestructurar el espacio por tal de garantizar el cumplimiento de las normativas actuales, lo cual implica una reforma de las aulas.

Con esta intervención, nuestro equipo pretende dotar de seguridad, confort y bienestar un espacio que acoge a niños de 0 a 3 años, uno de los públicos más delicados.

Utilizamos, nuevamente, materiales que permitan una buena limpieza y poco esfuerzo en cuanto a mantenimiento para favorecer un correcto envejecimiento de las infraestructuras. De esta manera, también permitimos educar los niños en la conservación de un espacio limpio.